52ª CLASICAS DE LA BAÑEZA

Una vez mas volvimos a reunirnos en la 52ª clasica urbana de la LaBañeza, esta vez quedamos en la Churreria de la nuestra localidad en la que nos desayunamos unos churros con su chocolate, o cafe, la verdad es que la idea fue estupenda, pues daba gusto oir llegar las diferentes maquinas y decir "por ahí llega el hierro de laura" como si de un comic de Joe Bar se tratara, je,je,je.

La ruta fué la habital de todos los años, aqui debajo una instantanea de la bajada antes de las curvas de llegada a Medina de Rioseco por la N-601.

Una vez en La Bañeza nos fuimos adentrando en la inmediaciones del circuito urbano con ese olor caracteristico de las motos de dos tiempos junto a las balas de pacas que componen la mayoria de los "pianos" del circuito.

Por sus calles parece estar en un museo de moto clasica o no tanto, pues puedes admirar desde modelos de bastantes años atras como las mas modernas deportivas o turisticas de la actualidad.

Tanbien nos paseamos por el particular mercado de la localidad donde admiramos muchos otros modelos restaurados y adquirimos la camiseta o el parche que mas nos gustó, incluso puedes ojear libros que leyendo algunas de sus paginas siempre te quedas sorprendido con algun párrafo o admirando fotos de las maquinas de antaño.

Aqui en el mercado nos encontramos con Conchi Y Celes y algunos de sus compañeros del Moto-Club La Virgen el Camino. Desde estas lineas les mandamos un abrazo.

Pero lo que realmente pone a uno los pelos de punta y le hace estremecer es el sonido de los motores rugiendo por las calles de la localidad, que al pasar a tu lado entre el olor que despiden y el sonido sus escapes le hacen a uno sentirse el ser mas feliz del mundo por unos instantes.

Tati y Jesus posando delante de una preciosa Bultaco dentro de la zona de Boxes

Despues de haber comido la paella y empanada de rigor junto a un buen café para espabilar la modorra, nos pusimos en marcha pues el cielo se tornaba oscuro y no era plan de volver mojandonos.

Fuimos dejando la lluvia detras de nosotros, tal y como pronostico nuestro

"The weahter Men Andres"

Nos llegamos a nuestra querida localidad y a la sede en la que nos contamos alguna batallita y alguno soñaba con cambiar de montura probando otras.